martes, 17 de marzo de 2015

Lo que no imaginé

Me llamo Verónica y tengo 4 años. Me gusta revisar el ropero de mi mamá, ponerme su ropa y sus zapatos, usar su maquillaje y sus collares de colores. Amo tanto a mi mamá, su olor y su presencia. Nunca me voy a separar de ella, no imagino mi vida sin que esté a mi lado.

Me llamo Verónica y tengo 8 años. Me gusta jugar a las muñecas con mi hermana y mis primas. Tenemos muchos accesorios y nos encanta imaginar que somos madres y que cuidamos a nuestros hijos y a los de cada una como si fueran nuestros. Que emoción pensar que un día será de verdad.

Me llamo Verónica y tengo 12 años. Me gusta sentarme a conversar con mi padre, es como una enciclopedia parlante. Amo que siempre nos cuidó con amor y respeto y me imagino cómo será de abuelo, consintiendo a sus nietos los domingos.

Me llamo Verónica y tengo 15 años. Me gusta el grupo de amigas que hice en la secundaria. Somos como hermanas y vamos a ser amigas siempre, nuestros hijos serán como primos y estaremos al lado una de otra siempre que nos necesitemos.

Me llamo Verónica y tengo 19 años.  Me gusta estar con mis amigos de la universidad. Me siento cómoda rodeada de personas que piensan como yo y en un grupo donde no hay dramas. Nos reímos todo el tiempo. Me gusta pensar que un día vamos a ser padres y nuestras familias se reunirán para hacer las fiestas más cool del año.

Me llamo Verónica y tengo 24 años. Me gusta mucho estar con mi familia, pero ya terminé la universidad y las cosas en el país están difíciles. Tengo la oportunidad de emigrar y no tengo nada que perder. Voy a hacerlo.

-------

Me llamo Verónica y tengo 31 años. Hace tres años que no veo a mi madre. Extraño demasiado su olor, su presencia. A veces me abruma pensar que terminamos tan lejos una de la otra. A veces no puedo dormir pensando en cómo hacer para que estemos cerca. Vivo todos los días con el vacío de no tenerla y con temor a perderla. 

Me llamo Verónica y tengo 31 años. Mi hermana y mis primas son madres. Y yo no conozco a sus hijos. Mi hija no tiene primos para compartir y crecer. Y poco a poco todas nos vamos regando por el mundo. Incluso si volviera, ya no vamos a estar todas juntas. 

Me llamo Verónica y tengo 31 años. Hace 3 años que no veo a mi padre. Me hace falta su cariño incondicional y sus ocurrencias que me hacen reír. Estoy segura de que Mími lo adoraría y el sería el abuelo más feliz del mundo de tener a sus nietos con el. Este domingo lleva al aeropuerto al único que tiene cerca y a "la otra mitad de su vida". 

Me llamo Verónica y tengo 31 años. De las 8 amigas del grupo solo tres quedan en Venezuela, y ya todas tienen fecha de partida con billetes de avión. Esta semana no he podido evitar pensar: ¿Será que alguna vez vamos a estar juntas de nuevo por lo menos por un día?.. la vida pasa sin darnos cuenta y a veces algo que parece simple se vuelve muy complejo. 

Me llamo Verónica y tengo 31 años. Mis amigos de la universidad, ojalá pudiera verlos. Los quiero y los extraño. Me hace falta el equilibrio que le daban a mi vida. Algunos ya son padres, me encantaría ver a sus hijos jugar con Mími. Serían los tíos más cool

Me llamo Verónica y tengo 31 años. A veces siento que he vivido dos vidas diferentes, y que la otra se va borrando, que me quedo sin historia. Me siento sola a pesar de tener tanta familia, de ser amada a distancia. Porque los domingos mi puerta no suena, nadie llega nunca sin avisar a mi casa. 

¿ Y Ahora qué?  


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...