El 2013 fue bonito, aunque echamos mucho de menos a nuestras madres. Espero tener la dicha de abrazar a la mía dentro de poco.
El año comenzó con la fecha más dulce: el cumpleaños de mi pequeña, seguido de nuestro viaje a Suiza en el que nos calentamos el corazón con la compañía de la familia y en cual vi a mi chiqui jugar por primera vez con su prima Mica.
Luego vino un viaje muy esperado por mi: París. Fue delicioso, y la experiencia de llevar a Mími a Disneyland es una que a pesar de agotadora, tenemos que repetir.
Mi pequeñita sonriendo en la cama la mañana en la que cumplía dos años del alta, ocupa el quinto momento más especial. Y después, una representación de todos los picnics que disfrutamos durante la primavera.
La visita al Oceanário de Lisboa fue especial, y me dejó muchas imágenes lindas.
Con el verano, llegó la playa, y las visitas a la biblioteca por las mañanas. En el noveno lugar vamos felices en el tranvía de Lisboa camino a la Biblioteca Camões.
También este año visitamos Sintra, después de tener muchas ganas de volver desde que Mími nació. Fue revitalizante el contacto con la naturaleza, y esta vez tuvimos la compañía de mi hermana, que fue lo mejor del verano sin duda.
Mími encantada disfrutó cada día al lado de su tía, hicieron un dúo fantástico.
Los amigos del parque fueron también de lo mejor del 2013, ver a Mími jugar acompañada, preguntar por ellos, compartir... los extrañamos mucho.
Poco antes de partir de Lisboa, salimos mi tigrita y yo a pasear por el barrio como si fuéramos turistas, y nos dejamos conmover por los miradores de la ciudad y su atardecer sereno.
Ahora en la casa en el pueblo, lo más especial es ver a Mími feliz cuando llega su abuelo, cuando le hace cariños al gato o cuando juega a lanzar hojas al río.
El paseo a Porto de este mes me sirvió para calentar los motores y comenzar a pensar en los viajes del 2014.
En la última imagen Mími pasea uno de sus regalos de Santa, que fue el último momento más hermoso de este 2013, ver su emoción al descubrir los paquetes debajo del árbol es una imagen que se valora y se guarda en el corazón para siempre.
Que tengan todos un buen 2014, lleno de salud y estabilidad. Valoremos lo importante, aprendamos a dar prioridad y a disfrutar más, nuestros hijos crecen, la vida se pasa rápido y hay que aprovecharla.