Llego al hospital, con mi positivo, esperando que por mi condición me hagan una ecografía de urgencias para ver si efectivamente hay embrión y si se colocó en un lugar correcto. Acceden a hacer el eco, 15 minutos de búsqueda y el bebé simplemente no aparece. Mi útero está tan enorme, tiene tantas irregularidades, que no dan con el bebé. Me mandan al laboratorio a confirmar que estoy embarazada.
Al otro día, y con mis resultados del laboratorio apoyando mi positivo, llego a mi primera consulta con la Dra. de infertilidad, después de decirle que creo estar embarazada (siempre he sido muy "Ver para creer") me lleva enseguida al cuarto de las ecografías, primero se queda azul al ver mi útero, y me dice que ella pensaba que yo estaba exagerando cuando le decía que tenía muchos miomas. Luego se concentra en buscar el embrioncito, y 10 minutos después, cuando ya casi me manda de nuevo al laboratorio se exalta y me dice: Ay! aqui está!!! es que está escondido, está encima de todo el desastre! Mira! y veo un corazoncito súper chiquito vibrando en blanco y negro....
No he terminado de emocionarme muy bien cuando me suelta que mi caso es muy complicado, y que no sabe si lo puedo lograr. Me manda a mi casa a descansar y esperar. Me da cita para dos semanas después. Pero apenas unos dias mas tarde tuve que ir a urgencias. Los miomas que tengo en la parte mas baja del utero comenzaron a crecer salvajemente con las hormonas, y me estaban bloqueando la circulación de la sangre a la pierna izquierda, causandome un dolor tan fuerte, que no podía ni levantarme de la cama.
Unas horas en urgencia con suero y paracetamol en la vena. Luego a casa.
Vuelvo al hospital unos días después. Lo primero, ver si el bebé está bien. Una ecografista muy buena me examina, la Dra. de guardia que me atiende está preocupada de una posible trombosis en la pierna y de que los dolores tan fuertes en el útero terminen causandome contracciones. Las dos se quedan de boca abierta cuando se dibuja la imagen en el monitor de ecógrafo. La ecografista me dice que no entiende cómo logré embarazarme, que los espermatozoides debieron ser "mínimo alpinistas" estoy asustada, pero no puedo evitar reirme.
Ahí estaba el bebé, más grande ahora, ya puedo ver sus piernitas mínimas, saltando como una pulguita, con el corazón latiendo fuerte.
Las Dras. se sientan, serias, me dicen que no pueden asegurarme que logre el embarazo, que no hay nada que puedan hacer, que mi útero es un caos, que mas bien debería quitarmelo, que mi vida corre peligro, y que si logro que este bebé nazca va a ser un milagro. Y yo pienso: "Bueno, si es un milagro de amor, de nuestra fe en que las cosas pasen, estamos bien, si es de esos de dios y la virgen, estamos jodidos..."
Es que ahora lo pienso y me da risa, pero soy sincera, eso fue lo que pensé, y no quiero ofender a nadie, respeto la libertad religiosa. Y si creo que los milagros pasan, pero no porque alguien divino intercede, pasan porque tantas personas queriendo con tanto amor y con tanta fuerza que algo suceda son una energía increíble, capaz de todo.
Total, me fui a mi casa, preocupada, pero tranquila, si es que eso existe. A enviar todas mis fuerzas al saquito en blanco y negro, a decirle que creo en el, y que mientras el esté luchando yo voy a hacer lo mismo, que no se preocupe si lloro o grito porque me duele, y me dolía mucho..
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